Muchos colegas al leer el título del presente post se sentirán alarmados por la palabra "castigo" en lugar de "acuerdos"...simplemente les diría que éste blog está dirigido a padres y la mayoría del conglomerado social maneja la palabra castigo, la cual en nuestro argot terapéutico señala más bien acuerdos o lo que conocemos en forma reciente como disciplina sin castigo, por ello espero los padres de igual forma asuman que al leer tal expresión en libros y revistas de terapia infantil, educación ó psicología, sepan que se trata de lo que se conoce comúnmente como castigo, pues en nuestros tiempos tal término no es utilizado por especialistas.
En palabras sencillas podemos definir los acuerdos...el castigo, como una forma para modificar conductas inadecuadas. Sin embargo es importante tener presente que no es y...en modo alguno debe ser, la única herramienta para modificar conductas.
Cuando hablamos de conductas...debemos inmediatamente remitirnos a la vida cotidiana de nuestros niños y les pregunto...es feliz un niño que vive constantemente bajo castigo?, por supuesto que no y es por ello que debemos variar las estrategias y llegar a negociar la forma menos traumática y más viable y sobre todo la que le permita al niño vivir su esencia como niño pero sin la convicción de que todo para él/ella...es posible, pues el camino más lógico y sano es...que lo obtenga a través de logros y crecimiento como ser humano...eso se aprende desde muy chica/o pero si nadie me lo enseña, cómo puedo saberlo?
En cuanto al castigo en sí, hay que tener claro cuatro aspectos básicos, el primero ya lo hemos mencionado...el castigo no debe ser la única herramienta para modificar la conducta en el niño.
Cuándo castigar a mi hijo? obviamente cuando lleve a cabo una acción inadecuada y que a la larga le forme anti valores...le impida crecer...madurar y sobre todo...ser feliz y muchas madres/padres me han preguntado aquí.... ¿Usted cree que yo le permitiría a mi hijo acciones que le lleven a ser infeliz? a no madurar? ...mi respuesta es...SI. Y a veces en demasía, lo hacemos de forma inconsciente, por desconocimiento...por desesperación...por comodidad, no es fácil ser padres y a veces el camino más práctico es la peligrosa "PERMISIVIDAD" y es oportuno reflexionar acerca de qué tanto le "permito" a mi hijo en pro...de mi comodidad y salir al paso rápidamente en cualquier situación.
Por otra parte, si hablamos del "cuándo castigar" necesariamente debemos referirnos a la importancia que tiene el hecho de que el castigo sea contingente a la conducta, es decir, en un período inmediatamente lógico posterior, pues no tiene efecto ni sentido aplicar un castigo para una conducta que el niño llevó a cabo la semana anterior, o cuando me veo desesperada o acorralada por el niño traigo a colación su acción inadecuada en días pasados...nada tan ilógico y con doble mensaje, además de confuso.
Por otra parte, si hablamos del "cuándo castigar" necesariamente debemos referirnos a la importancia que tiene el hecho de que el castigo sea contingente a la conducta, es decir, en un período inmediatamente lógico posterior, pues no tiene efecto ni sentido aplicar un castigo para una conducta que el niño llevó a cabo la semana anterior, o cuando me veo desesperada o acorralada por el niño traigo a colación su acción inadecuada en días pasados...nada tan ilógico y con doble mensaje, además de confuso.
Por otra parte no debemos caer en lo que denomino coloquialmente el "re castigo", en éste momento has llevado a cabo tal acción...al igual que la semana pasada...Error!!!, lo que ocurrió la semana pasada, por muy similar que sea, no es conveniente ni mencionarlo! pues simplemente lo reforzamos, debemos reforzar lo positivo...en modo alguno...lo negativo y recordar una conducta inadecuada, así como el castigo aplicado es de alguna forma...reforzar y propiciar que ocurra nuevamente.
Cómo debo castigar a mi hijo? es sano que en algunas ocasiones sea el mismo niño quien diga el cómo hacerlo...así se sentirá involucrado al máximo en la negociación y sentirá el proceso como algo importante para él/ella y sus padres.
Muchas veces me preguntan: y Usted cree es sano que sea el propio niño quien establezca el castigo? pero si es un niño! sabrá cómo hacerlo?, mi respuesta categórica es...SI y absolutamente SI, los niños son sumamente inteligentes y por ello manejan códigos de valores, ellos saben lo bueno y lo malo,simplemente no siempre hacen lo que deben por su condición de "niños" y les pregunto...hacemos los adultos siempre lo que debemos? aun cuando nuestros códigos de valores se encuentran ya estructurados?
El cómo siempre debe ir orientado a lo que el niño prefiere, disfruta y le gusta, ya que así la modificación en la conducta será más efectiva y dado que el mismo niño sabe lo que más disfruta, en base a ello formulará el castigo a ser implementado.
No es sencillo aplicar corrección a las conductas inadecuadas del niño/a y en ocasiones por ser cómodos propiciamos dichas conductas...es tu elección como padre ó madre, yo te preguntaría simplemente...qué clase de hijo quieres?
Es un tema muy importante y en base a tu respuesta...formula las estrategias a seguir pues se trata...de tu hijo!!! y cuando sientas que no puedes sola...busca ayuda Profesional!!!no es un pecado, ni es ser peor como madre ó padre y siempre adelante!!!

No hay comentarios:
Publicar un comentario